16 agosto: Estamos en Kyllini en parón forzoso al haber subido el viento en exceso. El adelantado desembarque del anterior grupo permite a su vez el embarque anticipado de Laura y Nuria, que vienen desde Granada.
Kyllini Kastro
17 agosto: Este primer día de ruta nos quedamos en tierra, lo que nos permite un poco de playa y descansar, que no viene mal algún descanso entre ruta y ruta. También podemos visitar en los alrededores Kyllini Kastro, que es el pueblo antiguo unos kilómetros tierra adentro, con un interesante castillo.
Puerto de Poros, Cephalonia
18 agosto: Calmado ya bastante el viento podemos ponernos en marcha. Nos dirigimos a Poros, en la isla Cephalonia, donde atracamos por la tarde, después de un fondeo de bañito en el sur de esa isla. Esta vez si encontramos bastante sitio. Al cumplirse la primera quincena de agosto se ha notado un descenso importante en la cantidad de barcos en ruta. En las afueras del pueblo encontramos una estupenda taberna donde cae la cenita de rigor. Y a última hora llegan Pepín y Susi, que completan la tripulación de esta semana.
Tripulación completa, Luisa, Susi, Nuria, Laura y Pepín.
Cala Koutsipia, Cephalonia
19 agosto: Salimos a última hora de la mañana, después de hacer un completo aprovisionamiento de víveres, que andábamos escasos. Navegamos hacia el norte por el canal entre las islas Cephalonia e Ithaka. Fondeamos en la bonita cala Koutsipia desde donde nos dirigimos al puerto Agia Efymia, también en Cephalonia. Este es el único puerto en que pagamos, el ayuntamiento gestiona el atraque, a un costo de 17,50€, con luz y agua.
El puerto nos sorprendió gratamente, un bonito pueblito, con magnificas tabernas y algunos locales de copas animados.
Ouzos de postre en la Taberna Steki, Agya Efymia.
Playa Agripidia, isla Kalamos
20 agosto: Salimos a media mañana y nos dirigimos al norte, rumbo a la isla Kalamos, donde llegaríamos por la tarde, después de un bonito fondeo para comer en la vecina isla Kastos. Llegamos pronto por lo que atracamos sin problema, lo que nos permite darnos el paseo hasta la playa Agripidia.
Playa Agripidia, Kalamos
Espectacular lugar, por el que parece no haber pasado el tiempo. Una tabernilla, algunas viviendas de pescadores a la orilla del mar y unos cuantos pantalanes de madera forman un paisaje muy evocador.
La visita a la taberna de George cierra un magnífico día. La cena junto al mar es literal…
Taberna George´s, Kalamos
Porto Leone, isla Kalamos
21 agosto: Hoy la ruta es corta, para lo que salimos a media mañana de Kalamos, y sin abandonar la isla, fondeamos en Porto Leone, un pueblo en ruinas destruido por el terremoto de 1953 y que supone una muy curiosa visita. Solo la iglesia está en servicio.
De Kalamos nos dirigimos a la cercana isla de Megannisi, donde fondeamos en una de sus muchas y profundas calas. A la caída de la tarde atracamos en el atractivo puerto de Vathy, en la misma isla.
Vathy, isla Megannisi
Cueva Papanikolis, Megannisi
22 agosto: Salimos de Vathy dirigiéndonos a la isla Skorpios, ya visitada en rutas anteriores, pero de paso obligado. Ahí sigue el barquito del ruso actual propietario, celosamente vigilado por los agentes de seguridad en la zodiak atentos a que nadie cruce la línea de boyas al efecto.
Playa en el interior de la cueva
Ya es momento de arrumbar al sur, para lo que tomamos el canal entre la isla Levkada y Megannisi. Y es en el sur de esta isla donde visitamos la cueva Papanikolis, y que tenía mucha curiosidad por conocerla. La cueva no tiene mayor interés, más allá de la historia que le cuentan a los turistas en las constantes excursiones que los acercan allí, acerca de que servía de refugio a submarinos alemanes en la segunda guerra mundial, cosa del todo falsa, ya que cualquiera que vea la cueva y haya visto un submarino, de cerca, convendrá en que tal historia es del todo imposible de ser cierta.
Tras la visita en la auxiliar a la cueva nos dirigimos a nuestro destino, de nuevo en la isla Cephalonia, el puerto de Fiskhardo. Hay que llegar pronto, que es el puerto de mayor demanda de todo el Jónico. Y con no poca suerte, llegamos y encontramos el último atraque al muelle en todo el meollo del puerto.
Fiskhardo
Atraque a pie de tabernas en Fiskhardo
El sitio está muy bien, estéticamente muy cuidado, con sus casas bien pintadas en distintos colores. El nivel de tabernas, y sus precios, son algo más elevados de lo habitual, hay un considerable comercio del que alegran la visita a las chicas… muchas boutiques, y tiendas de complementos, eso sí, con precios a la altura de Ibiza o Marbella… Es una visita obligada, pero a decir verdad, prefiero la mayoría de los pueblitos que estamos visitando, mucho más originales, sin la adulteración que aquí se percibe.
Fiskhardo
23 agosto: Teníamos la intención de salir a primera hora, con una ruta larga por delante. Pero el frecuente caso del enredo de cadenas mañanero hoy ha venido a complicarse más de lo habitual. Un barco de chárter, en tal situación, se le ha ocurrido la brillante idea de destrincar la cadena de la caja, arriarla al fondo, supongo que con la pretensión de pasarla toda por debajo de la que lo mantenía atrapado. No se me ocurre otra posible intención para tan peregrina maniobra. Más de dos horas estuvo el teutón atareado en tal dislate, con el resultado de hacernos perder un tiempo que luego echaríamos en falta.
Nos dirigimos al sur, pero recorriendo la ruta por la cara exterior y oeste de la isla Cephalonia, lo que nos permite visitar Asos, un pueblito dominado por una enorme fortaleza veneciana, las playas de Mirtos y la cala Atheras.
Cala del Naufragio, isla Zakhintos
Ocaso en la cala del Naufragio
Próximos al ocaso, llegamos al norte de la isla Zákinthos, a la cala del Naufragio. Con las últimas luces del crepúsculo fondeamos y visitamos el famoso barco, pero sabe a poco… El retraso en la partida nos ha fastidiado….
Pero… los planes están para ser cambiados, así que decidimos quedarnos a pasar la noche. Estamos solos en tan espectacular escenario. Así que nos disponemos a darnos una cena a la altura del lugar.
Cena en el fondeo
Amanece en la cala
Exploramos el barco… solos…!!!
El perfil de la cala genera una acústica notable y el ruido de la mar nos acompaña en la oscuridad más absoluta, que no hay luna. El fondeo es seguro, hay buen tenedero y tengo la línea a tierra firme al timón del naufragado, pero resulta algo movido a media noche, ya que la cala está expuesta al NW y se levanta un viento intenso, que afortunadamente no es persistente. Y lo más destacado, estamos solos…!!! Eso es totalmente imposible durante el día, ya que se trata posiblemente de la mayor atracción turística de la isla y son miles los turistas que a lo largo de cualquier día pasar por la famosa playa llevados en todo tipo de embarcaciones, ya que no hay acceso por tierra.
24 agosto: La amanecida, en calma, es un placer para los sentidos… La oscuridad absoluta se va iluminando, y posiblemente sea el mejor baño de toda mi vida, cuando la tripulación aun dormía y el silencio era ensordecedor…
A las 09:15 abandonamos la cala, cuando empiezan a llegar los primeros del día…
Bordeando el norte de la isla llegamos a la Cueva Azul, donde encontramos un buen lugar de fondeo y podemos hacer una detenida visita, tras lo que nos dirigimos a Zákinthos, fin de esta ruta, desembarcando Laura y Nuria, permaneciendo Pepín y Susi a bordo.
Fondeo en la Cueva Azul, isla Zakhintos
EN EL MENÚ DE LA DERECHA ESTÁN TODAS LAS FOTOS DE ESTA RUTA
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El Mediterráneo desde el Corfú IV 
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